Una de las más grandes y notorias problemáticas con las que se enfrentan las empresas familiares es que deben encontrar ese balance entre conservar sus valores, tradiciones y esencia, pero al mismo tiempo transformarse lo suficiente como para poder innovar y sobrevivir en el mercado tan competitivo que hay hoy en día.

La innovación en muchas partes del mundo es algo en lo que las empresas llegan a invertir grandes cantidades de tiempo y recursos, pero que al mismo tiempo es  poco común que se haga bien, por lo cual encontrar una estrategia de innovación que funcione es algo preciado en el mercado.

En este momento existen demasiadas recetas para la innovación pero ninguna ha llegado a poder ser la universal, la que se pueda aplicar a cualquier negocio con cualquier tipo de mercado.

Existen dos tipos de innovación: la disruptiva y la incremental.

La primera es ese producto o servicio que sin dar previo aviso llega a cambiar completamente la forma en que trabaja y funciona un mercado. Grandes ejemplos de esto son Apple (con sus computadoras), Netflix (con su servicio de streaming), Airbnb (con la renta de alojamientos particulares).

La segunda trata sobre ese cambio gradual que se realiza a un producto o servicio que ya existe en el mercado. Claro ejemplo de ello son los cambios que se van haciendo de generación en generación a los aparatos electrónicos como computadoras y celulares, que con cada generación van adquiriendo mejoras o nuevas funciones, esto generalmente se da en empresas grandes ya bien establecidas en el mercado.

Las empresas familiares tienden a parecerse a las empresas grandes en el aspecto de que ya tienen establecida su forma de hacer las cosas, la cultura dentro y fuera de ella, así como tradiciones, lo cual puede ser tanto bueno como malo, ya que si no se tiene cuidado puede llevar a la empresa a quedarse en el pasado, sin transformarse y mejorar.

Para examinar si tu empresa se dirige por el camino correcto hacia el futuro puedes hacerte y contestar las siguientes preguntas:

1.- ¿Qué hace mi empresa el día de hoy para asegurarse de seguir operando en el futuro?

Esto puede tratar tanto de tener un plan de apoyo en casos como la pandemia así como adaptarse a las megatendencias del mercado como lo son la sustentabilidad y las nuevas tecnologías.

2.- ¿Qué tanto tiempo se invierte en detectar nuevas oportunidades?

Muchas veces estamos tan metidos en nuestra labor del día a día que no nos tomamos un momento para analizar desde afuera con objetividad lo que estamos haciendo bien y lo que podemos mejorar, ya sea en procesos, servicio al cliente o cualquier otra parte de la serie de pasos que mantienen a nuestro negocio a flote

3.- ¿Hay algún innovador en tu empresa? ¿se le apoya?

En la mayoría de las empresas siempre habrá alguien que presente propuestas que puedan ayudar al negocio a mejorar. Los líderes de una empresa deben aprender que aunque ellos no sean especialistas en innovación deben aprender a dar apoyo al talento que sí es capaz de hacerlo.

4.- ¿Hay diversidad dentro de la empresa? ¿qué tanta libertad hay para pensar diferente dentro de la empresa?

Algo que puede ayudar a tu negocio a no quedarse estancado en el pasado es que tu equipo lo conformen personas con diferentes tipos de pensamiento, experiencias y contextos. Esto ayudará a la compañía a encontrar nuevas oportunidades y generar propuestas disruptivas.

5.- ¿Mides el riesgo de los cambios?

Es demasiado importante tener parámetros que nos ayuden a medir el éxito o ver qué podemos hacer para mejorar cualquier servicio, producto o proceso nuevo que estemos implementando. Esto nos puede servir sobre todo a la hora de presentar resultados a las “viejas generaciones” de la empresa familiar, lo cual si es aceptado por ellos puede ser que le den más apoyo a la transformación y así poder avanzar de una forma más fluida hacia el futuro.

Debes recordar que la innovación debe aportar mejoras y beneficios tanto a la empresa como a su mercado. Siempre se debe pensar en el para qué y no en el qué. De la misma forma conservar tradiciones y costumbres que no aporten nada deben modificarse o desecharse.

Así que recuerda que lo más importante aquí es poder conservar los valores de tu empresa y al mismo tiempo innovar y transformar tus servicios o productos para mantenerlos vigentes.

Te proponemos idear sobre las posibles innovaciones de tu empresa juntos, solo necesitas contactarnos a través de nuestra sección de contacto en la parte inferior.

Innovar sin perder la identidad y centrar nuestras propuestas en las personas es nuestra especialidad, y es un reto que estamos seguros podremos lograr juntos.